martes, 10 de febrero de 2009

Mis deseos de volar

Volar, lo soñaba, con alas o sin ellas, flotar, elevarme en el firmameto infinito, más extenso que la eternidad. Yo siempre soñe con volar, lo soñaba.
Hasta que sucedio, escuchando tus susurros en idioma extranjero, empezé a volar sin poderlo controlar, flotanto como si se hubiera invertido mi gravedad, tan extraño que tuve que anclarme a tierra para no perderme en el cielo.